Marketing con emojis: qué es y cómo aplicarlo

La idea principal es muy sencilla: si quieres integrar emojis en tu campaña de marketing, solo tienes que utilizarlos; en Facebook, Twitter, Instagram o, incluso, en mensajes instantáneos y correos electrónicos.

Sin embargo, en la mayoría de casos la cosa no es tan simple. En este artículo te contamos en qué consiste esta estrategia de marketing digital, si es apta para tu empresa, qué errores deberías evitar y cómo utilizan otras empresas los emojis en su marketing.

¿Qué es el marketing con emojis?

En primer lugar, ¿qué es un emoji?

Se puede definir como un pictograma similar a un emoticono procedente de Japón que sugiere un estado de ánimo, objeto, lugar, animal, comida, etc. (en mensajes electrónicos).

Todos los hemos visto alguna vez: en WhatsApp, Instagram, Twitter, Facebook y, realmente, casi en cualquier parte.

(getemoji.com)

Por cierto, existe una diferencia entre los emoticonos y los emojis. Los primeros son iconos similares a una cara que los servicios de mensajería instantánea utilizan de forma independiente para sus plataformas o son caras creadas «manualmente» con signos de puntuación (:-)).
Los emojis, sin embargo, son los pictogramas estandarizados que conocemos de Apple, Android o WhatsApp, y que incluyen muchos más símbolos, además de caras.

(https://trafficgenerationcafe.com/emoji-marketing-guide/)

La variedad de emojis se amplía y se renueva constantemente. Por ejemplo, en julio de 2018 ya formaban parte del estándar Unicode unos 2666 emojis.

El marketing con emojis designa, por tanto, una estrategia de marketing y comunicación que incorpora estos pequeños pictogramas a las campañas publicitarias de una empresa. Los emojis se emplean sobre todo en las redes sociales y, por ello, este tipo de marketing se suele dar principalmente en estas plataformas.

¿Por qué apostar por estrategias de marketing con emojis?

El componente visual es importante en nuestra mezcla de contenidos, ya que las personas asimilamos un 90 % de la información de forma visual. Esto significa que el cerebro humano procesa la información visual de forma más rápida y efectiva. Los profesionales del marketing valoran ya de por sí los contenidos visuales; entonces, ¿por qué no emplearlos en forma de emojis? A diferencia de otro material visual, los emojis son muy fáciles de utilizar y están al alcance de todos. Con los emojis no existen barreras lingüísticas; más bien son como un idioma propio, comprensible en todo el mundo.

Además, los usuarios cada vez prefieren un contenido más breve y más simple, y los emojis son ideales para ofrecérselo. Por lo visto, en la era digital, las personas tienen una capacidad de atención inferior a la de un pez de acuario, justo la suficiente para concentrarse en los emojis.

Además, suelen llamar mucho la atención y tienen un alto factor de reconocimiento, especialmente si se incorporan de forma creativa en las estrategias de marketing propias.

Dado que los emojis están presentes diariamente en la vida de la mayoría de los clientes (y, al contrario de lo que se piensa, no solo de los «millenials», sino también de personas de todas las edades), es de suponer que los entienden. El 92 % de los usuarios utiliza los emojis; la mayor parte de ellos, también de forma habitual.

Además, con su empleo, los usuarios se sienten incluso más aludidos, sobre todo en el plano emocional. Los emojis transmiten las emociones de una forma más clara, rápida y explícita que los textos y, a la vez, consiguen que los usuarios sientan más simpatía por el emisor.

Esto implica, entre otras cosas, un aumento del ratio de fidelización («engagement rate»). Por ejemplo, las publicaciones con emojis en Twitter tienen un «engagement rate» un 25,4 % mayor, mientras que en Instagram este ratio aumenta incluso hasta el 47,7 %.

La tendencia hacia el marketing con emojis va en aumento y muchas empresas están impulsando su aplicación de forma manifiesta. Entonces, ¿por qué renunciar al marketing con emojis?

¿Cómo se aplica el marketing con emojis?

Antes de decidirte por incorporar emojis a tus estrategias de marketing, deberías pensar bien en si el concepto se adecua o no a tu empresa y a tus destinatarios.

La publicidad con emojis suele tener, por ejemplo, una buena acogida entre el público más joven. Sin embargo, esto no quiere decir que solo puedas utilizarlos si vendes productos para adolescentes, ni tampoco que vayas a atraer a jóvenes por utilizar muchos emojis.

No obstante, si piensas que estos dibujitos podrían encajar con tu producto y con tus clientes, hay pocas restricciones. Por lo general, tienen cabida en las redes sociales, pero también en correos electrónicos, en notificaciones push o incluso en publicidad impresa. También funcionan bien en artículos de promoción.

Si todavía no estás seguro, haz una pequeña prueba y échales un vistazo a las estrategias de tus competidores. ¡Atrévete a ser creativo!

Por otra parte, es importante que te asegures de que los emojis se ven bien en todos los terminales y plataformas. Por ejemplo, si los quieres utilizar en boletines para marketing por correo electrónico, es posible que algunos proveedores no permitan visualizarlos.

Por tanto, pese a que sí existen algunas limitaciones, te sorprenderá el amplio alcance que tiene el marketing con emojis.

A pesar de que muchos piensan que los emojis no tienen cabida en publicidad o en textos un poco más formales, no tiene por qué ser así. Hay estudios que demuestran que utilizar emojis apenas influye en la credibilidad y que pueden causar una reacción positiva en el destinatario, incluso en correos electrónicos de carácter profesional. Sin embargo, cuando se trate de clientes o temas serios, se recomienda tener prudencia. Como es de imaginar, este método tendrá una menor aceptación por parte de un cliente comercial B2B que por parte de un cliente particular de entre 18 y 25 años.

También es fundamental que te fijes en los emojis que eliges. Hay muchos emojis que se pueden interpretar de forma ambigua o que tienen distintas connotaciones en diferentes ámbitos. Si los utilizas mal, tu mensaje publicitario podría malinterpretarse.

Además, comprueba siempre que los emojis se adecuan a tu empresa. Es recomendable que elijas imágenes que representen a tu producto en lugar de optar por las más generales. Dado que la variedad de emojis se amplía y se actualiza constantemente, cualquier tipo de empresa debería poder encontrar sin problemas uno que sea válido para ella. Si no encuentras ese emoticono que transmita tu mensaje, prueba a combinar varios.

Por ejemplo, ¿a qué película se refieren aquí?

Errores en el marketing con emojis

El marketing con emojis puede aportarte muchas ventajas, pero solo si lo utilizas bien. Por tanto, presta atención a los siguientes aspectos para que tu estrategia dé buenos resultados.

• Los emojis tienen que tener sentido y adecuarse al mensaje del anuncio/de la empresa.
• Tienen que ser apropiados y comprensibles para el grupo destinatario.
• No son adecuados si se tratan temas importantes y muy serios.
• No los uses de forma forzada; los emojis deben ser más bien un complemento a la forma normal de expresarte.
• No utilices muchos emojis seguidos (por lo general, no más de cuatro).
• Utiliza emojis adecuados para tu marca.
• Familiarízate con sus diferentes significados: algunos emojis se asocian con cosas diferentes a las que simbolizan. Por eso, consulta antes, p. ej., en la Emojipedia.

Fundamental: no los uses de forma forzada o exagerada. El hecho de que el marketing con emojis esté ahora de moda y de que haya tenido éxito para otras empresas no significa necesariamente que vaya a ser así con la tuya. Si incorporas los pictogramas por todas partes, sin ton ni son, no serán bien recibidos por tus clientes.

Ejemplos de marketing creativo con emojis

A continuación te presentamos una serie de ejemplos, tanto buenos como malos, de marketing con emojis.

Un ejemplo muy famoso de cómo se pueden emplear los emojis con ingenio y de forma atractiva lo tenemos en esta valla publicitaria de la película de Marvel «Deadpool».

Otro modo de integrar los emojis en las publicaciones de las redes sociales es el «emoji art», que consiste en crear una imagen global combinando muchos emojis. Así no se transmite un mensaje muy trascendental, pero se impulsa la fidelización y la popularidad de la marca, como han demostrado Domino’s Pizza o Bud Light.

No obstante, a la hora de comunicar sus mensajes, las empresas no solo apuestan por los emojis estándar, sino que algunas hasta crean los suyos propios. Después, los integran únicamente en sus anuncios (como ha hecho McDonald’s con su M dorada) o los ponen a disposición de sus clientes para que los puedan utilizar también en sus mensajes y publicaciones. En este segundo caso, el ejemplo más conocido seguramente sean los Kimojis de Kim Kardashian. Pero también IKEA ha creado sus propios pequeños pictogramas que permiten a sus clientes expresar con emoticonos todo lo referente a la compra de muebles. También Durex lanzó una operación de marketing para que todos los proveedores incluyeran por fin el emoji de un preservativo y ha presentado una petición para ello.

Gran interés es el que también despertó Domino’s con una campaña en Twitter, con la que consiguió llevar el marketing con emojis a otro nivel. Previo registro, sus clientes podían pedir una pizza enviando únicamente el emoji de la pizza.

WWF también lanzó una ingeniosa campaña en Twitter con el fin de recaudar fondos para especies en peligro de extinción, concretamente, mediante una selección de los emojis que simbolizan estos animales. Al retuitearla, los usuarios se inscribían en esta campaña y, por cada tuit en el que utilizaran una de estas imágenes, WWF añadía 0,10 € al final de la campaña. Así se pretendía incentivar a hacer donaciones, pero al final los usuarios podían decidir libremente si querían transferir o no el importe calculado.

Por su parte, Coca-Cola se hizo con todos los dominios con un emoji sonriente para una campaña publicitaria en Puerto Rico.

Pero también hay otras campañas que, más bien, erraron el tiro y se pasaron un poco con los emojis.

Por ejemplo, Chevrolet redactó todo un comunicado de prensa solo con emojis, lo que causó un gran revuelo, ya que nadie consiguió descifrarlo correctamente. No obstante, dado que poco después publicaron la solución, esta iniciativa acabó atrayendo mucha atención para su marca.

Y, por último, en esta campaña del productor de zumos Tampico los emojis empleados son tan incomprensibles que el cliente no sabe qué es lo que pretende transmitir la empresa con ellos.

Emoji y SEO

También en Google se pueden hacer búsquedas por emojis. Por lo tanto, es posible adaptar el posicionamiento en buscadores de manera que la propia web aparezca en estas búsquedas. Dado que aún no se dispone de información sobre los algoritmos de estos resultados de búsqueda, no se puede indicar qué debe hacerse concretamente para posicionarse bien. Si se incorporan las palabras clave de forma adecuada en los textos y estos coinciden con un emoji, Google los puede asociar solo a partir del texto. Otra posibilidad es que intentes integrar los emojis en tu contenido, pero solo si el contenido realmente se ajusta a ellos.

Como siempre, al poner en práctica estas medidas debe tenerse en cuenta el grupo destinatario y los terminales utilizados.

Conclusión

Los profesionales del marketing no se ponen de acuerdo: unos piensan que a los emojis no se les ha perdido nada en tus anuncios, sobre todo, porque muchas empresas los utilizan de forma excesiva. Un estudio muestra que el 59 % de las personas entre 18 y 34 años piensa que las empresas se esfuerzan mucho en incorporar los emojis y que se equivocan.

Sin embargo, otros piensan que justo ahora se puede conseguir el éxito mediante estrategias de marketing con emojis, ya que con ellas se mejora enormemente la fidelización y el mensaje llega mejor a los destinatarios.

Por tanto, lo mejor es que consideres si este principio se adecua a tu empresa y a tus clientes y, de ser así, no deberías dejar pasar esta oportunidad para conseguir más fidelización y retención de clientes.Marketing con emojis: ¿qué es y cómo aplicarlo de forma efectiva? Marketing con emojis: ¿qué es y cómo aplicarlo de forma efectiva?